Evelyn Labanda Morán conversó con este Diario sobre su incursión en el programa ‘De casa en casa’ y los retos que se han impuesto en su camino.

Evelyn Labanda Morán no solo fue la primera abanderada con síndrome de Down en Ecuador; a sus 27 años también se ha convertido en la primera reportera del país con esta condición genética. “Me siento muy feliz de haber obtenido estos logros. La verdad me siento muy orgullosa”, declara en una entrevista con este Diario. Pero la joven dice que su verdadero triunfo es llevar a más lugares su mensaje sobre la verdadera inclusión social. “Me hace pensar que estoy abriendo caminos para otra persona de mi condición, porque le estoy demostrando que las personas con síndrome de Down sí podemos alcanzar todo lo que nos proponemos“, sostiene.
Durante el confinamiento por la pandemia, Labanda se animó a empezar con su propio programa de entrevistas por su cuenta de Instagram. Bajo el nombre de ‘Evelyn te cuenta’ entrevistó a personalidades como Pancho Molestina, Jorge Heredia, Andreína Bravo, Alejandra Jaramillo, entre otros. Una iniciativa que incluso llamó la atención de la prensa internacional, a quienes confesó que uno de sus más grandes sueños era conducir un programa de televisión.
Ese anhelo finalmente se está concretando, pues su programa ahora es parte de las mañanas de TC Televisión, como un segmento de ‘De casa en casa’. “Estoy contenta y agradecida con Dios porque él siempre me ha ayudado a salir adelante”, expresa Labanda sobre esta nueva etapa de su carrera y su vida.
Es graduada como tecnóloga en publicidad y esta profesión la acerca mucho a la comunicación, oficio que también disfruta ejercer. “Es una rama que tiene diferentes tipos de herramientas de la publicidad”, considera la joven guayaquileña, que también se ha desenvuelto como locutora de radio.
Cuenta que la producción del canal la está ayudando a prepararse aún más con cursos de modelaje, dicción y muy pronto arrancará una capacitación de desenvolvimiento escénico.
Dice que de la televisión admira a Úrsula Strenge, a quien ve como una amiga y un ejemplo de vida. “Es una mujer maravillosa, con un gran ejemplo (…) ella me ha enseñado su cariño, su amistad y su confianza. Yo quiero ser como ella totalmente”, refiere.
Disfruta compartir en el calor de su hogar. “Mi familia siempre ha sido mi gran ejemplo, y especialmente mi mamá que es mi pilar fundamental. Una mujer grandiosa, una mujer que da todo lo mejor para mí”, declara.
Uno de los retos más grandes de la vida fue culminar su carrera como tecnóloga, etapa en la que tuvo que enfrentarse con algunos obstáculos y limitaciones. “Yo no tuve ninguna adaptación curricular y algunos de mis compañeros y profesores no me comprendían, no me tenían paciencia, por lo que en ocasiones me estresaba y terminaba llorando”, relata Labanda.
“En una ocasión mis padres decidieron retirarme de la universidad, pero yo les dije que no, que yo salía de la universidad cuando yo tuviera mi título de tercer nivel bajo el brazo. Y así fue, lo logré”, añade con precisión.
Fuente: www.eluniverso.com (Mishell Sánchez)